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miercoles 24 de abril del 2024

La muerte de Diego Maradona: allanan la casa y la clínica del médico del Diez e investigan un homicidio culposo

Los procedimientos sobre Leopoldo Luque fueron dispuestos por la justicia de San Isidro, a partir de las declaraciones de las hijas del Diez y otros dos testigos que relataron una fuerte discusión tres días antes de su muerte.

La investigación sobre la muerte de Diego Armando Maradona tomó un nuevo giro ya que dos testigos declararon que el Diego habría discutido con su médico tres días antes de su muerte.

Ambos declararon en el expediente y revelaron que el jueves anterior a la muerte del ídolo existió una pelea con su médico personal, Leopoldo Luque, que incluyó un “empujón”.

Los procedimientos sobre Leopoldo Luque fueron dispuestos por la justicia de San Isidro, a partir de las declaraciones de las hijas del Diez.

Orlando Díaz, juez de garantías de San Isidro, requirió a través de un exhorto a la Justicia porteña el allanamiento en la casa y el consultorio privado de Leopoldo Luque, el médico personal del mejor jugador de todos los tiempos que falleció el mediodía del miércoles 25 de noviembre en el barrio privado San Andrés, del partido bonaerense de Tigre, tras un pedido de los fiscal de Benavídez Laura Capra, a cargo del caso con el fiscal general del distrito John Broyad y los adjuntos Patricio Ferrari y Cosme Iribarren.

Las actuaciones se realizaron durante la mañana del domingo en el domicilio ubicado en la calle 30 de septiembre de Adrogué, donde vive el profesional de 39 años, y en el consultorio privado emplazado en la intersección de la avenida Libertador y Juramento, en el barrio porteño de Belgrano. La Justicia encara una investigación por supuestas irresponsabilidades en el cuidado del paciente desde su internación en la clínica Ipensa de La Plata, donde se internó el 2 de noviembre para realizarse chequeos generales por un evidente deterioro en su salud. Luque habló, por entonces, de un cuadro de deshidratación y de anemia: especificó que no comía y que estaba psicológicamente mal.

La sospecha ahora es de homicidio culposo y llega tras a las declaraciones testimoniales que ayer tomaron a Dalma, Giannina y Jana, las tres hijas de Maradona. Los investigadores, en procura de indagar sobre las causales de muerte, solicitaron la historia clínica, los detalles de su tratamiento y del posoperatorio luego de haber sido intervenido por un hematoma subdural en su cabeza y de su cuadro de abstinencia. Buscan corroborar presunciones y las sospechas vertidas por sus hijas, saber qué medicamentos le recetaban.

El incidente fue expuesto en las declaraciones testimoniales de uno de los enfermeros que asistieron al Diez en las horas previas a su muerte , y en la de Romina Milagros Rodríguez, “Monona”, la cocinera que hace años acompañaba a Diego y era considerada por él como una segunda madre en estos últimos años.

“Es cierto que contaron que hubo una pelea, pero en el expediente está mencionado como un incidente más de lo difícil que era tratar con Maradona”, explicó a Télam uno de los investigadores judiciales.

Según la declaración del enfermero, el hecho se produjo el jueves 19 de este mes, en la que habría sido la última visita de Luque a la casa del country San Andrés de Tigre.

Los fiscales tratan de confirmar cuándo fue su último paso por la vivienda donde Maradona se recuperaba de su reciente neurocirugía por un hematoma subdural.

Además, el viernes se conoció el audio en que el médico llama al 911 para pedir una ambulancia. Fue a las 12.16 del miércoles, minutos antes que se declarara la muerte de Diego.

“Hola, qué tal, ¿podés mandar una ambulancia urgente al barrio San Andrés, de Tigre? La calle es Italia, es un barrio cerrado. En el lote 45. Hay una persona que se encuentra, aparentemente me dicen a mí, con un paro cardiorrespiratorio. El médico lo está asistiendo”, se lo escucha decir a Luque en una grabación que llamó la atención de los investigadores: el doctor nunca menciona que la ambulancia era para Maradona.

El enfermero contó que ese día Maradona insultó a su médico, lo echó y hasta hubo “un empujón”.