La decisión de los jueces fue dar marcha atrás con la decisión que había tomado el juez de Garantías de Moreno, Gabriel Castro, quien otorgó la libertad por una caución de 20 millones de pesos. Se revocó su excarcelación y se definió que siga detenido. Sin embargo, horas más tarde, Castro definió beneficiarlo con la prisión domiciliaria.
La víctima, un vecino del músico, dijo que, al día de hoy, él y su grupo familiar reciben amenazas del entorno del cantante y eso fue valorado por los camaristas Carlos Risuleo, Horacio Reggi y Verónica Bainotti.
Gastón Torres es el vecino que denunció a L-Gante y fue porque, según acusó, el cantante lo privó de su libertad obligándolo con un arma a subir a su vehículo.
Según esa denuncia, el vecino había tenido un problema con los amigos de L-Gante a la salida de un boliche.
A partir de la decisión de la Cámara y teniendo en cuenta la prisión preventiva impuesta sobre L-Gante, seguirá detenido hasta el juicio oral y público.
La pena que enfrenta el cantante tiene una expectativa de hasta 15 años de prisión en función de los delitos de amenazas en concurso con privación ilegítima de la libertad.
El cantante ofreció que, en caso de salir en libertad, trasladarse a otro domicilio debido a que su vivienda queda a metros del vecino que lo denunció, pero, por ahora, la Justicia rechazó sus argumentos y determinó que siga preso.
PRISIÓN DOMICILIARIA
Horas después de la definición de los camaristas se conoció la determinación del juez Castro, quien definió el beneficio de la prisión domiciliaria para el músico. De esta manera seguirá detenido pero en la vivienda de su representante. Maximiliano Barbaccia, ubicada en un barrio privado de la localidad de Canning, en el partido de Ezeiza.
L-Gante permanecerá detenido en aquella propiedad y será monitoreado con tobillera electrónica. De todos modos no será hoy su salida de la cárcel. Ya que la medida será ejecutada una vez que quede firme. Ya que la fiscalía apelará la definición del juez y será nuevamente la Cámara de Apelaciones de Mercedes la que definirá la suerte de L-Gante.
«Entiendo que corresponde hacer lugar a la imposición de una medida de coerción menos gravosa como ser la morigeración en el domicilio aportado, bajo la modalidad de prisión domiciliaria con monitoreo electrónico”, definió el juez en su fallo.
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