Un grupo de personas se juntaron en Ibarlucea para confeccionar grullas destinadas a una joven jugadora que se encuentra pasando un delicado estado de salud. La propuesta fue hecha para las 18 horas en el club Logaritmo.
Cuenta la leyenda que, en Japón se regalan grullas de Origami para desearle a la otra persona salud, felicidad bienestar y prosperidad. Así fue que familiares, amigos y la comunidad del club se juntaron para armar mil grullas en honor a Sofia Kellemberger.
Sofía es jugadora del club Logaritmo y se encuentra en un delicado estado de salud.
