Risas, miradas y una pantalla circular de fondo con seis líneas que la atraviesan simulan ser las cuerdas de una guitarra. Nueve y quince minutos marcaron los relojes. “Movimiento” fue el tema elegido por Drexler para iniciar el show. El péndulo, en ese momento, rozaba el lado este del City Center reflejando la tristeza de la canción. “Estamos vivos porque estamos en movimiento” recita el cantante.
«Salvavidas del hielo», se titula el disco y revela su compromiso con el cuidado del medio ambiente. El concierto fue un viaje por su historia. Entre sus letras el amor, la oscuridad, el agradecimiento, lo desconocido, la vida misma son los protagonistas.
El péndulo no dejó de desplazarse por el salón. De este a oeste. De la alegría a la tristeza. El público acompañó cada uno de los acordes, con chasquidos, así lo pidió Drexler. Minutos antes de la media noche el cantante junto a su banda puso punto final al recital. Sin decir más, con los pies plantados en el centro del escenario saludaron y disfrutaron de los aplausos, gritos y el baile.
Rosario Nuestro estuvo presente, mirá el video.