por Joaquín Sánchez
En homenaje a los 44 tripulantes de submarino ARA San Juan, desaparecido desde el 15 de noviembre del año pasado, la Asociación Cultural Sanmartiniana “Cuna de la Bandera” decidió pintar un mural para recordarlos. El artista plástico Miguel Brulé, más conocido como “Noke”, es el encargado de esta pintura que se presentará oficialmente este viernes en la esquina de Salta y España, donde se encuentra ubicado el Colegio San José. “Las causas nobles son mi pasión. Dar una mano a las personas siempre me gustó y forma parte de mi esencia desde chico. Cuando esta gente me convocó para pintar el mural, obviamente acepté”, dijo el muralista a Rosario Nuestro.
“Cuando vimos que pintaron un mural en Caleta Olivia, nos dimos cuenta que en Rosario también tendría que haber uno. En ese momento, nos pusimos en la búsqueda de un paredón para hacerlo y la gente del San José, muy gentilmente, nos cedió una parte de su pared”, contó Carlos Bukovac, de la Asociación Cultural Sanmartiniana.
Al lado de la imagen del submarino, se podrá ver al Espíritu Santo junto a la frase, inventada por el Noke mismo: “¿Por qué buscáis en lo profundo lo que está aquí en lo alto conmigo?”. Soldados de Malvinas, gauchos y granaderos junto a San Martín también acompañarán al ARA San Juan. “Hay un poco de ternura, de poesía y la intención de dejar un mensaje. Siempre tratando de respetar la seriedad del caso”, expresó “El Noke”.
Este viernes a las 19 será la inauguración oficial y habrá un acto de la Asociación. Al mismo están convocados miembros de la Sanmartiniana, amigos, familiares, gente del Colegio San José y todos los que quieran acercarse. Desde la Asociación Cultural manifestaron que les hubiera gustado invitar a las familias de los tripulantes, pero entienden que todavía “están con mucho dolor y esta es una situación muy difícil para ellos”.
Tanto Carlos Bukovac como “El Noke” coincidueron en que la idea del muro es que “los argentinos no se olviden de los 44 tripulantes”. “El arte es una buena forma de que la gente siga en nuestros corazones, más en una esquina tan transitada y en un colegio, donde los chicos pueden pasar y ver el mural”, concluyó Bukovac.
