Una problemática que se ha instalado y que cada vez se da con mayor frecuencia, tiene que ver con los hackeos a través de redes sociales, de WhatsApp, de Instagram, de distintas aplicaciones, de las billeteras virtuales, etc. Para evitar caer en la trampa, es necesario conocer y tener presente medidas de seguridad, fundamentalmente en los dispositivos móviles.
“Si tenemos que hablar de recomendaciones, en primer lugar las que tienen que ver con la seguridad propia de las aplicaciones. En toda aquella aplicación que lo permita, hoy la mayoría lo permite, sobre todo de redes sociales, activar el segundo factor de autenticación, que es un código extra, una capa más de seguridad que nos brinda la aplicación para, en caso de que nos hackeen desde otro dispositivo, alguna cuenta como puede ser de WhatsApp, de Instagram, de Facebook o de cualquier red social, al atacante le exija un segundo factor, una segunda clave, que al no tenerla no va a poder utilizar la cuenta”, expresó, al aire del programa El Puente, que se emite por Radio Mitre Rosario, Leonardo Gianzone, director de la Tecnicatura Universitaria en Ciberseguridad de la Universidad del Gran Rosario.
“Eso, en primer lugar, porque nos va a dar la tranquilidad de que ese segundo factor nos llegue a nuestro dispositivo y cuando el hackeo se realiza desde otro nos vamos a dar cuenta porque nos va a solicitar esa clave y el atacante no va a poder hackear esa red social porque no va a tener ese segundo factor”, amplió.
Asimismo, el especialista señaló como segunda medida, “en todo lo que sea aplicaciones vinculadas con banking, billeteras virtuales, Billeteras Santa Fe, Modo, Mercado Pago, cualquiera, mantener siempre la aplicación cerrada. Es engorroso y molesto cada vez que uno la quiere utilizar, tener que ingresar el usuario, el DNI o la contraseña, pero esto va a evitar que si nos roban el teléfono, lo que se dice en caliente, mientras uno lo está usando, que está abierto porque a lo mejor no hay que ingresar ninguna clave para entrar, no se encuentre el delincuente con todas nuestras billeteras o todas nuestras aplicaciones con las que manejamos o transferimos dinero o pagamos abiertas y a mano. Mantenerlo cerrado”.
“Y después, utilizar claves en los dispositivos y en las aplicaciones que no sean las mismas para todas las aplicaciones, que sean de alguna manera robustas, difíciles de adivinar, pero que sean fáciles de recordar para el usuario, evitar fechas de cumpleaños, aniversarios, nombres de familiares”, agregó.
Respecto a las contraseñas, “lo aconsejable es que hay un montón, que pueden descargar tanto en la PC, en una notebook, como en un dispositivo móvil. Es cualquier bóveda de contraseña o sector de contraseña. Ahí se pueden guardar todas las claves, pueden ser distintas, incluso las mismas, estas mismas bóvedas de contraseñas, sugieren una clave generalmente muy robusta, muy difícil de recordar, pero uno la tiene ahí y en realidad es lo que uno únicamente recuerda. Una sola clave que es la que le permite ingresar a este sector de contraseña y ahí busca la que tiene o la que necesita”.
De hecho, “la mayoría de los dispositivos, de los teléfonos móviles, hoy vienen ya con una bóveda propia del dispositivo, de la marca del dispositivo. Lo que yo siempre recomiendo, no porque sea mala, eso lo destaco siempre, Google, todos los teléfonos hoy funcionan con nuestra cuenta de Google, de Gmail. Por eso, siempre que ingresamos una clave nueva nos aparece un cartelito que dice si queremos guardar la clave o no. Yo sugiero no guardarlas ahí porque en un teléfono, Google está siempre abierto. Entonces, si me roban el teléfono, van a entrar a mi bóveda de contraseñas y van a tener todas mis contraseñas. No es porque sea mala, porque no lo es, por el contrario, es muy buena como la mayoría de los productos de Google”, concluyó Gianzone.
