El titular de Paseo Pellegrini y referente del sector gastronómico local, Alejandro Pastore, analizó la restricción a la circulación nocturna que comenzará a regir este viernes en todo el país para frenar la curva de casos de coronavirus. «No resuelve el problema de fondo, somos espacios de sociabilización seguros «, expresó durante una entrevista al aire del programa El puente, que se emite por Radio Mitre Rosario.
Si bien manifestó disconformidad respecto de la medida y recalcó el carácter «desacertado en este contexto donde se está intentando cubrir 9 meses de pasivos», Pastore afirmó que el sector espera la salida del decreto presidencial para tener mayores precisiones. «Hay que ver cómo queda redactado ese decreto, si es una reducción de la circulación vehicular, una reducción de la circulación peatonal o un cierre total del comercio», remarcó.
En ese sentido, consideró: «Si fuera una restricción total nos parece una medida que no va a resolver el problema de fondo» y ahondó: «Estamos mirando cómo avanzan los casos y sabemos que eso está vinculado a situaciones que dependen en gran parte de nosotros mismos, de aquellos organizan fiestas clandestinas, aquellos que se reúnen en el espacio público sin respetar distanciamiento ni protocolos o los que se reúnen en las islas sin distancia bajo la mirada atenta de Prefectura que no actúa en consecuencia». De ahí que se mostró disconforme con la resolución: «La medida para resolver eso es atacar a un sector que está fiscalizado, se ajusta a protocolos, que tiene control por parte del Estado y que propicia un espacio de sociabilización seguro».
Por otra parte, enfatizó en la crítica situación de los trabajadores de la actividad. «Teníamos 400 mil trabajadores del sector gastronómico a marzo del año pasado y en septiembre 225 mil. Quiere decir que de cada 10 trabajadores gastronómicos 6 perdieron su trabajo y esta medida va a hacer que aquellos que están todavía en la actividad trabajen menos horas. Va ser muy difícil que alguien pueda encontrar atractivo un producto para salir a cenar entre las 8. 30, que todavía es de día y cierra a las 22.00».
Finalmente, se esperanzó con la puesta en marcha de reglamentaciones internas municipales y provinciales para mitigar el impacto. «Apelamos a que tanto municipio como provincia puedan de alguna manera flexibilizar con una reglamentación que así como está no resuelva el problema de fondo y nos parece prácticamente descabellado. Sabemos que hay una situación que resolver pero las herramientas para resolver tienen que ver con atacar específicamente los focos de contagio y hoy la gastronomía no lo es», concluyó.
