Fuerte corrección en los mercados mundiales sin lugar a duda arrastró al nuestro. Este viernes el S&P 500, índice que reúne la cotización de las principales 500 empresas estadounidenses, tuvo una caída del 2,12% (bajó 3,75% en la semana, una baja que hacía rato no se veía). Al mismo tiempo la tasa de 10 años de los bonos del tesoro de USA se ubicó en 2,85% con una suba de 19 puntos básicos en la semana lo que es muchísimo. Esto habla a las claras de que los inversores están empezando a asustarse del mercado accionario y buscando refugio en los bonos, lo cual no es nada bueno para nuestro país.
El mercado accionario argentino no estuvo exento de este miedo global y el índice Merval cayó el 7,15% en la semana (casi todo el viernes), casi 3.000 puntos desde el máximo para cerrar en 32.614 puntos. Una verdadera sangría. Enero había cerrado con una ganancia de más del 16% pero 2 días de febrero alcanzaron para llevarse la mitad de esa suba. Por ahora es una fuerte corrección, pero habrá que ver cómo sigue. Creo que van a ser semanas muy duras las que vienen porque no solo el mundo está entrando en una etapa de mayor aversión al riesgo sino que inversores están empezando a escaparle al riesgo argentino. Una prueba de esto es el IPO de la empresa Central Puerto SA ($CEPU) el jueves pasado en nueva York. Pretendía recaudar arriba de USD 2 por acción y solo consiguió USD 1,65 lo que provocó el viernes una caída del precio de más del 16%
Los bonos no estuvieron exentos de esta muy mala semana y dieron prueba de que está ocurriendo un flight to quality. Es decir, los inversores prefieren huir del riesgo argentino y refugiarse en bonos del Tesoro estadounidense que empiezan a mostrar rendimientos interesantes. Los más golpeados fueron sin duda los bonos largos emitidos en dólares que cayeron en promedio un 2% a pesar de que el dólar se mantuvo estable. También es para remarcar en la semana la fuerte caída que tuvieron los cupones atados al PBI (21% cayo el emitido en pesos) señal que los inversores consideran que no se va a gatillar el pago en diciembre 2018 en función del crecimiento de la economía de 2017. Es decir, los inversores consideran que la economía no creció por encima del 3%
El dólar, justamente como lo mencionáramos, cerró la semana prácticamente sin cambios luego de haber tocado un máximo histórico el miércoles 31 de enero. El mayorista se ubicó en 19,50
La buena noticia vino por el lado de los commodities. En enero la soja recuperó todo lo que había perdido en 2017. En tan solo un mes en Chicago subió un 4,6% y cerró en 366 dólares por tonelada. Esto más la suba del dólar generaron una esperada recuperación en el precio local logrando superar los $5.500 por tonelada.
También el petróleo tuvo una fuerte alza en lo que va del año del 8%. Esto si bien es malo por el lado del aumento de los combustibles, por otro lado hace más rentables los emprendimientos petroleros en Vaca Muerta y similares y podría empezar a reactivar esa industria.
La mala noticia vendría (no está confirmada aún) por el índice de inflación de enero que superaría el 2% con una inflación núcleo cercana al 1,9%. La inflación sigue fuerte y el Banco Central baja las tasas…. habrá que ver cómo termina este experimento argentino. Lo que sí está confirmado es que las expectativas de inflación relevadas por el mismo Banco Central aumentaron 2% en el REM (monitor de mercado). Este es el primer relevamiento emitido desde la “recalibración de metas de inflación” y el mercado parece no considerar que es solo un cambio de números enunciados.
Todas estas noticias y la mejor información económica-financiera la podrán encontrar en nuestra sección de noticias, donde recopilamos lo más importante que acontece en el país.