La Municipalidad de Rosario promulgó la ordenanza antilavado que había sancionado el Concejo, que busca el control para la prevención del lavado de activos. Fue este miércoles por la mañana en el Salón Carrasco, donde estuvieron presentes, entre otras personalidades, fiscales del Ministerio Público de la Acusación (MPA).
Luis Schiappa Pietra, fiscal de la Agencia de Criminalidad Organizada -quien colaboró en el debate de comisión junto a su colega Matías Edery-, celebró esta medida. «Nos parece un momento auspicioso. La particularidad de Rosario hace necesario este tipo de ordenanzas», destacó.
Para el fiscal, esta ordenanza, que fue «producto del trabajo de varios autores que buscan combatir el crimen organizado», va a «nutrir» de información a determinados «contextos investigativos» que pueden traducirse en «procesos penales». La idea es «agilizar el trabajo colectivo» entre las distintas agencias.
«Ir contra el dinero es una de las estrategias por las cuales hay que avanzar. Es un tema complejo, pero si no será muy difícil desarticular estas bandas», expresó Schiappa Pietra, quien consideró que los rubros que más irregularidades han presentado en el lavado de activos han sido el inmobiliario, el de la construcción, la gastronomía y la compra y venta de dólares.
En el mismo sentido, Jorge Baclini, fiscal general del Ministerio Público de la Acusación, destacó la «importancia» de las alertas que se generarán para poder «prevenir». «Al momento de iniciar investigaciones, será importante tener esa información de manera rápida y celera. Las terminará facilitando», manifestó.
Sobre los rubros a investigar, Baclini dijo que será en donde haya «grandes movimientos de dinero». «Esto es en fiel respeto del comerciante, el industrial y el empresario que realizan su labor honestamente. Lo que se busca atacar acá son los negocios delictivos que, mediante el lavado de activos, ingresan al mercado legal de capitales», aclaró.
