El fiscal de la Agencia de Delitos Complejos y Criminalidad Organizada, Matías Edery, se refrió este lunes a la amenaza que recibió por parte de Lorena Verdún, viuda de Claudio «Pájaro» Cantero en plena audiencia imputativa.
«En el momento, cuando uno está trabajando, lo ve como parte de su labor. Uno cae sobre el peso de las palabras cuando termina la audiencia y se relaja un poco. Viniendo de quien viene, es una situación para preocuparse», afirmó el funcionario del Ministerio Público de la Acusación (MPA).
«Para nosotros el resultado es satisfactorio después de una culminación investigación que fue muy larga. Con respecto a los dichos de la señora no se puede tomar más que una amenaza. Si una persona que le acabamos de secuestrar un arsenal de 24 armas en su casa no puede considerarse de otra forma y lo tomo como tal», explicó. Y agregó: «Ella dice que se armó una situación en particular en contra de su familia y yo tomé la palabra manifestando que era una amenaza»
Cuando fue consultado por si recibió solidaridad desde el arco político, Edery expresó: «Recibimos apoyo de todos los sectores políticos, instituciones, periodistas no solamente para mi personal sino también a la Agencia de Investigación Criminal. Yo tengo seguridad hace mucho tiempo y se comunicó conmigo el gobierno de la provincia y del Ministerio».
«En la investigación fuimos en profundidad con el seguimiento de Lucho Cantero por balacera contra dos efectivos policiales y nosotros dimos cuenta que esas mismas armas se encontraban en el domicilio de Lorena Verdún. Luego corroboramos que con unas imágenes del pasado 24 de diciembre donde ese mismo arsenal de armas secuestradas se utilizaron para disparar al aire y hemos encontrados vainas arriba de los techos».
«Él ostentaba el uso de armas a través de las redes sociales. Hace tiempo que estamos detectando que hay una faltante de armas , como la FAL que fue secuestrada en el último operativo», enfatizó el fiscal.
«Yo creo que Rosario es una ciudad violenta. Hay varios conflictos de bandas criminales que luchan entre ellos pero el gran problema es que utilizan a la clase media para extorsionar como las amenazas a comerciantes para pedir dinero», concluyó.
