Mónica Fein, precandidata a diputada nacional por el Frente Amplio Progresista, dialogó este viernes en El Puente por Radio Mitre Rosario de cara a las elecciones primarias del próximo domingo 12 de septiembre y realizó una radiografía de cómo se encuentra la ciudad y la provincia tras haber dejado su mandato de intendente en diciembre de 2019.
«La situación de la gente hoy es muy difícil porque está pensando en cómo llegar a fin de mes, a conseguir trabajo, a recibir la segunda dosis. La política claramente la ha defraudado. Decidimos constituir esta lista para saber qué opina la gente de mí. Siente un cariño, respeto y consideración porque nos valora», comenzó Fein.
«El desafío de un gobierno que entra es tratar de no empeorar la gestión anterior. Nosotros tenemos un equipo con capacidad de gestión y sabemos lo que tenemos que pelear a nivel nacional después de haber estado ocho años en Rosario», continuó.
Cuando fue consultada por una renovación de su partido político, la ex funcionaria explicó: «El Frente Amplio Progresista tiene una mirada muy respetuosa y seria. Nosotros siempre estuvimos en las buenas y en las malas pero con valores como la Salud, la Educación, entre otros. Necesitamos ser una opción más para generar trabajo y oportunidades para la gente, fortalecer el sistema de Salud y volver a los territorios».
«Rosario tiene una impronta propia pero en materia de Seguridad hemos empeorado. Nuestros índices a nivel general en la gestión habían bajado pero el que entró no vino con un nuevo proyecto y se paralizó todo».
A la hora de realizar propuestas, la ex intendenta de Rosario esgrimió: «El proyecto nuestro es para defender los valores de Santa Fe. Representa el valores de la honestidad, del trabajo y del futuro que le dé esperanza a la gente y que pueda confiar. Tenemos que tener una visión de futuro, porque llegar a gobernar no es difícil, el desafío está en transformar la realidad como hicimos en ocho años».
Y añadió:»Creo que hay que sumar para un proyecto y todos los que se quieren sumar bienvenido sea. Mediante el diálogo se pueden debatir ideas con otras posiciones de la política».
Por último, Fein admitió el golpe que recibió el partido político tras el fallecimiento del ex gobernador Lifschitz: «La partida de Miguel generó muchas cosas porque apuró a alguno que discutieron liderazgos y salieron a bancar a otros frentes. Nos desordenó pero a la vez nos obligó a pensar en otro proyecto que resuelva los problemas de la gente».
