Tras varios años de litigio, finalmente dos de las mujeres amparistas lograron su incorporación definitiva a la empresa de transporte Movi y este viernes ya se subirán a un colectivo. Así lo informó Romina Perea, abogada defensora de las choferes que habían denunciado a la compañía municipal por discriminación.
«Dos de las amparistas firmaron el acta de la empresa Movi, se presentaron a hacer todo este requisito previo de firmas de documentación necesario para llevar a cabo la tarea de conductores», dijo Perea en primera instancia sobre las incorporadas. Y detalló: «Este jueves tienen un entrenamiento de inducción que consiste en todo un día de preparación teórico respecto a temas específicos de su tarea».
«Ya este viernes comenzarán con el manejo de unidades», reveló la letrada, quien a mismo tiempo informó: «Una de las chicas va a estar en la parte del galpón eléctrico, que serían las líneas Q y K y la otra de las chicas estará en las unidades móviles comunes que conocemos».