La Federación Española de Fútbol recibió una carta por parte de la entidad madre del fútbol mundial, donde le advierte que las injerencias del gobierno español pueden recaer en una suspensión como miembro asociado. Es decir, implica la expulsión de todas las competencias en las que participa.
Según el diario El País, la propuesta del Concejo Superior de Deportes (CSD) de que se celebren unas nuevas elecciones a la presidencia de la FEF es la que ha provocado la respuesta de FIFA. Dicha propuesta fue remitida por el Tribunal Administrativo del Deporte al Concejo de Estado, que hasta aquí no ha metido su dictamen.
Para FIFA, la posición de la CSD es una intromisión gubernamental que pone en riesgo la autonomía de la Federación y supone una grave violación de sus propios estatutos, lo que daría lugar a una inminente suspensión.
