El último aumento del 34,5 por ciento del boleto interurbano de colectivos impactó fuerte en los bolsillos de los pasajeros que viajan desde Rosario a localidades vecinas o viceversa. El incremento, que rige desde el domingo, encendió las quejas de los usuarios, quienes necesitan trasladarse para cumplir con sus obligaciones laborales, estudiar o retornar a su pueblo. «Esto es una locura», señaló un joven estudiante entrerriano, indignado tras la suba.
En diálogo con Radio Mitre Rosario, un estudiante de Maciá, Entre Ríos, que utiliza el servicio todos los fines de semana señaló, indignado: «Esto es una locura. Se fue todo a la mierda (sic). Me vuelvo todos los fines de semana y el pasaje se fue a 400 pesos». A él le siguió una mujer que viaja semanalmente a trabajar a Roldán. Previo al incremento abonaba 45 pesos, ahora paga 56: «Es lamentable. Sube todo menos los sueldos».
«Cada vez se hace más complicado viajar. Va subiendo muy rápido (el boleto). Yo tengo una constancia de estudiante por la que me hacen un descuento. Así y todo está muy difícil», subrayó otro joven alumno de una facultad local.
Los relatos de los usuarios van todos en la misma línea. «Es imposible de sostener para alguien que viaja todos los días a Rosario», afirmó otra chica que vive a 80 kilómetros de la ciudad y reveló que antes del aumento el boleto costaba 172 pesos contra los 226 actuales. «Es una vergüenza. No les importa nada», disparó otra adolescente.
Con todo, si bien en su momento se barajó la posibilidad de desdoblar el ajuste en dos tramos, finalmente se dio todo de una sola vez. La del domingo fue la primera actualización de 2019 en el transporte interurbano en un año electoral que llegó con otras tarifas de servicios remarcadas.
