La comisión de Gobierno del Concejo Municipal recibió a un grupo de emprendedoras de la ciudad, quienes junto a una de sus coordinadoras, Iara Lingua, denunciaron aprietes y amenazas de parte del representante del gremio de vendedores ambulantes, Beto Riba.
“Nos dijeron que si no nos afiliamos a su sindicato nos iban a hacer una protesta y que nos iban a llevar a juicio; esas fueron las amenazas”, contó Iara.
En su exposición frente a los concejales las emprendedoras aseguraron que “hace años que realizamos eventos independientes en un hotel de la ciudad con todo en regla”. Además especificaron: “No tenemos relación laboral entre nosotras, somos todos monotributistas en un lugar privado donde vender nuestras cosas”. Y se preguntaron: “¿No sé qué más quieren?”.
Por su parte el Concejal de Juntos por el Cambio se refirió al secretario gremial de los vendedores ambulantes como “un personaje que incurre regularmente en este tipo de amenazas y aprietes en busca de algún beneficio económico, sea a través de la afiliación al sindicato o por otros medios”. Y agregó: “no vamos a permitir ni naturalizar la extorsión a quienes quieren laburar”. “Desde el Concejo las vamos a acompañar para que esto no vuelva a suceder”.
Durante el intercambio entre los concejales se debatió sobre la normativa que abarca a los vendedores ambulantes y en particular la modalidad de trabajo de Iara y sus compañeras. Todos los ediles presentes concordaron que la actividad realizada por las emprendedoras no está fuera de ningún marco legal y no ingresa como vendedores ambulantes por desarrollarse en un lugar privado.
Finalizando Roy López Molina, aseguró que “no están solas, las vamos a acompañar y, si quieren avanzar estos mafiosos, lo vamos a llevar a la Justicia”.
