Los cauces de el Río Paraná, que van desde Santa Fe hasta el Chaco, impactaron por la aparición de un video en el que pueden percibirse una gran cantidad de peces muertos. Los casos comenzaron a registrarse a mediados del mes en pasado en Paraguay, y luego Argentina, en los ríos Paraguay y Paraná.
Sucede en los cauces más bajos, y los especialistas consideran que no estaría vinculado con un problema de contaminación sino con un aumento de la temperatura del agua como consecuencia de la ola de calor de los últimos días, como también a la crecida en los niveles.
Tanto la pesca como las actividades costeras, temen por la ingesta de peces muertos, ya que muchos tienen signos de descomposición, lo que implica un riesgo para la salud de las personas, en caso de que sean comercializados.
Se cree que la temperatura del agua y la crecida, llevaron a que los peces queden atrapados y mueran por asfixia.