Pavada de irresponsabilidad la de Néstor Ortigoza, quien se dejó llevar por un momento de calentura en el tramo final de lo que fue derrota de Central contra Huracán, fue justamente expulsado y recibirá dos fechas de suspensión por reincidencia.
Resulta que aún no se cumplieron tres meses de la anterior vez que el Gordo vio la tarjeta roja: había sido el 9 de noviembre en la derrota 2-1 frente a Atlético Tucumán como visitante.
El reglamento de la AFA en cuanto a transgresiones y penas es bien claro y no da margen para la duda: Ortigoza recibirá dos jornadas de sanción, por lo que se perderá el clásico ante Newell’s en el Coloso del domingo 10 de febrero. Además se le prohibirá ejercer como capitán del equipo por un mes.
De esta manera, se le abre de par en par las puertas de la titularidad a Leonardo Gil, quien reaparecería el sábado cuando Central reciba a Aldosivi desde las 21.30, y tendrá también la chance de seguir en el once inicial para el choque contra la Lepra.