Se llama Juan Carlos Ledesma, pero muchos (por no decir todos los rosarinos) lo conocen como el vendedor de paraguas de la peatonal Córdoba. Desde hace 58 años que se dedica a esta profesión y asegura que sus dichos, sus risas y sus saludos a cientos de personas que pasan diariamente por el lugar lo ayudan a aumentar sus ventas. Está convencido que con sus 70 pirulos, si se candidatea al Concejo de la ciudad entra caminando.
Hay algo en lo que asegura que nunca se equivocó, y es el clima. “Eso es simple, uno que viene del campo de Córdoba ya sabe cómo puede venir el clima. Miro la luna, la salida del sol y ya me doy cuenta, no necesito ningún pronóstico”, dice Juan Carlos mientras mira el cielo. “Tengo paraguas con aire acondicionado para los calurosos, paraguas antibala para los policías y paraguas especiales para todo el mundo”, comenta a modo de risa.
Y hoy, con este clima inestable, ya tiene todo listo para vender porque confía en que se viene la lluvia. ¿Habrá acertado Juan Carlos?