El hotel alojamiento de San Juan al 1200 donde murió una joven el lunes pasado no estaba habilitado, tal como confirmaron fuentes de la Municipalidad a Rosario Nuestro. Pero además, se le suma un historial de clausuras y denuncias penales por falta de cumplimiento de la normativa. Desde el Municipio aclararon que la muerte de la mujer no tiene nada que ver con el trámite legal que permite que el lugar esté abierto o no, ya que hasta el momento se sabe que la víctima no sufrió una muerte traumática.
El edificio en cuestión no es novedad para más de un rosarino. El lugar es vox populi: un antro, un telo; en líneas generales: un hotel transitorio con mala fama en la ciudad, a pesar del centro, a pesar de las ya no tan nuevas y fuertes luces de calle San Juan. La noticia del deceso de una joven el lunes pasado llevó a poner el foco en el lugar donde había sucedido la muerte, más allá de que el edificio y el fallecimiento no tengan nada que ver. Lo cierto es que con el foco puesto, el hotel no sólo siguió vislumbrándose lúgubre, sino también sin habilitación.
Desde la Municipalidad de Rosario aseguraron que el hotel transitorio de San Juan 1235 no cuenta, hasta la fecha, con habilitación correspondiente. Pero sí advirtieron que está transitando todavía el plazo prudencial que se le da a los comercios para poner los trámites en regla.
No es la primera vez que el hotel pasa por esta situación. Ya hay una inspección registrada del año 2010 en la que se constató que no tenía ninguna habilitación. El lugar pasó por el plazo contemplado en las normativas y en la inspección siguiente continuaba sin el trámite. Esa vez se clausuró y, tras la violación de la clausura, el Estado aplicó una denuncia penal. De esa manera, la Justicia queda involucrada e informada del accionar municipal ante cualquier eventualidad en el inmueble no habilitado.
El hotel se habilitó en 2011 y hasta 2016 se mantuvo abierto y en orden, salvo por una clausura por una falta mínima. La habilitación tuvo que renovarse en noviembre de 2016 pero la persona que figuraba a cargo había fallecido. Según indicaron vecinos, el hijo se hizo cargo. La habilitación, sin embargo, no se renovó y el hotel, remarcaron desde la Municipalidad, estuvo cerrado hasta, al menos, agosto de este año.
La última inspección fue el 11 de septiembre y se constató que el hotel no estaba habilitado. Hasta el momento, el lugar transitaba el lapso de tiempo tipificado para darle lugar a emprender el trámite de habilitación. Si en la próxima inspección no está en orden, se procede a la clausura.
Una muerte sin traumas ni lesiones internas
Cecilia Raquel Torres, de 38 años, murió el lunes en el hotel transitorio de San Juan al 1200. Hasta el momento, y según indicó el preinforme de autopista, no hubo muerte traumática. Las pericias médicas también señalaron que no había lesiones internas. Además, la fiscalia informó que la mujer sufría de antecedentes cardíacos, por lo que se ordenó examen anatomopatológico.
Torres no estaba sola. Un hombre de entre 40 y 50 años estaba con ella y aportó datos coincidentes con elementos aportados por testigos y resultados de preinforme médico. El hombre fue el que pidió ayuda y que luego aseguró que la mujer no era trabajadora sexual, sino que fue un encuentro casual. Ese dato también fue corroborado por testigos y familiares de la fallecida.
