No es ningún misterio que Leonardo Gil es el principal apuntado para ser transferido en la imperiosa necesidad que tiene Central de aliviar su economía. Destinos varios se mencionaron: Brasil, México o Estados Unidos. Sin embargo, ninguno de ellos realizó una oferta concreta y ahora el GPS recalculó para dirigir el futuro del volante a un lugar bastante más lejano.
Se trata del Al-Ittihad de Arabia Saudita, que posó los ojos en el Colo y según trascendió en las últimas horas tiene muy avanzada la negociación con el club de Arroyito. Si bien no se dio a conocer la cifra, de concretar la venta, a las arcas auriazules ingresarían entre 1,5 y 1,8 millones de dólares limpios.
Cabe destacar que más allá que la transferencia es muy necesaria y Diego Cocca lo sabía, en la reunión que tuvo con los dirigentes el lunes de la semana pasada, les dejó en claro que por cada titular que emigre pretende un reemplazo. Por ende, la idea será agudizar el ingenio para encontrar en el mercado de pases un futbolista de similares características a las de Gil pero sin tener que desajustar el acotado presupuesto.
Por otra parte, otro de los frentes abiertos en cuanto a posibles ingresos de dinero es el de la venta del 80 por ciento del pase de Duván Vergara a América de Cali, la cual parecía estar lista a fines de la semana pasada pero sufrió algunas demoras. De todos modos, en Central confían que en los próximos días se hará oficial la transferencia.
Surgieron dos nombres para la zaga
Mientras los directivos canallas siguen negociando con sus pares de Racing por la continuidad de Miguel Barbieri y realizarán en las próximas horas una oferta formal para la compra de la mitad del pase, también empezaron a sondear a otros defensores. Es que si el jugador surgido en Defensores de Belgrano sigue, de todos modos llegará un refuerzo en la posición porque el que tiene un pie y medio fuera es Matías Caruzzo, cuyo futuro estaría entre el regreso a Argentinos Juniors y Talleres de Córdoba.
Por lo tanto, en las últimas horas se conocieron dos nombres que tienen el visto bueno de Cocca. Uno de ellos es Matías Silvestre de 35 años, quien comenzó su carrera en Boca y lleva más de una década en el fútbol italiano (vistió las camisetas de Inter y Milan, entre otros). De todos modos, tras su último paso en el Empoli, quedó con el pase en su poder y acarrea una inactividad de más de seis meses. El otro apuntado es Joaquín Laso, de 29 años, pieza importante en el Vélez de Gabriel Heinze y que se encuentra en Atlético San Luis de México, sin demasiada continuidad.
