Lionel Messi debutó finalmente este domingo con la camiseta del PSG tras estar 21 años en el Barcelona y los argentinos estuvieron muy expectantes a ese partido. Además del triunfo 2 a 0 ante el Reims gracias a un doblete de Mbappé, se vivió un tierno momento entre el rosarino y el arquero del equipo rival, con un chupete que demoró la foto.
Es que el serbio Predrag Rajkovic, se acercó a la Pulga con su hijo en brazos y le pidió una fotografía. El capitán del seleccionado argentino aceptó, cargó al niño y con su mejor sonrisa se dejó retratar por el propio Rajkovic, quien planificó de antemano la situación.
Pero el niño tenía el chupete en su boca y el portero se lo sacó para que la imagen, que seguramente quedará en la historia del pequeño, fuera lo más «limpia» posible.
El rosarino hizo su ingreso a los 20 minutos del segundo tiempo, en reemplazo de su amigo Neymar Jr, para el triunfo 2 a 0 a domicilio.
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