El analista económico Salvador Di Stefano afirmó este jueves en CNN Radio que “el Gobierno no entiende algo tan simple como la oferta y la demanda”, a la vez que señaló que ”hay regulaciones ridículas”.

En el programa Café con Pepe, el especialista indicó que “la oferta y la demanda existen en el mercado y la resultante son los precios”.

“Estados Unidos, China, la Unión Europea y Japón también están muy endeudados, con aranceles del 400 por ciento del PBI, según datos de 2019. Ahora, con la pandemia, emiten y se endeudan”, manifestó.

En diálogo con Pepe Gil Vidal, Di Stefano consideró, trasladando este escenario a la Argentina, que “en algún momento, esa deuda va a haber que pagarla. Cuando la economía se empiece a recuperar, esa gran masa de pesos va a general inflación”, en un contexto que sugiere que “vamos hacia un mundo inflacionario”, resaltó.

El experto sopesó, por otra parte, que hay que reforzar ”la logística de las vacunas”, que es “el mayor problema” de la campaña de inmunización contra el coronavirus.

“La demanda existe en el mundo y se refleja en los precios”, destacó en otro tramo de la entrevista, al mismo tiempo que en nuestro país, dijo, “vamos a vivir bloopers como el de la carne. ¿Cómo hacés para conseguir cortes baratos cuando la oferta se focaliza en la Capital Federal y el Banco Central?”, subrayó en alusión al acuerdo firmado por el Gobierno con las cámaras de frigoríficos y supermercados para establecer rebajas de hasta un 30 por ciento en el valor de cortes populares de carne vacuna. “Hay que generar más ofertas para bajar el precio de los alimentos”, acotó.

“El Gobierno, cuando reestructuró la deuda soberana, se fijó objetivos y el mundo financiero acompañó. Después el ministro de Economía (Martín Guzmán) les dijo a las provincias vayan, estos muchachos son fáciles. El FMI y el Club de París responden no pará, las provincias tienen que pagar. Tenemos 11 ofertas para la Provincia de Buenos Aires y todavía no hay acuerdo”, comentó. La estrategia argentina ante el Fondo Monetario Internacional consiste en “alargar el plazo y no pagar por tres años”, deslizó.

Para Di Stefano, la Argentina “sigue estando en default” y “los bonos que reestructuró no valen nada”. Además, las autoridades nacionales “les dicen a las empresas que pidan tres años de gracia”.