Este jueves el FBI detuvo a Ghislaine Maxwell en Bedford, New Hampshire, en el noreste de los Estados Unidos. Se trata de la ex pareja de Jeffrey Epstein, el multimillonario acusado de pedofilia que se suicidó en agosto del año pasado en su celda del Centro Penitenciario Metropolitano en Manhattan. Está señalada como quien armó la red de tráfico y abuso de menores, aunque todavía no dieron información respecto a los cargos que pesan sobre su figura.
Según trascendió, los fiscales penales acusaron a Maxwell por un cargo de conspiración para contratar menores para viajar y participar en actos sexuales ilegales, un cargo de encierro de un menor para participar en actos sexuales ilegales, un cargo de conspiración para transportar menores con intención de participar en actividades sexuales criminales y dos cargos de perjurio.
Con respecto a las situaciones de abuso, de acuerdo a testimonios de las víctimas, se daban en Nueva York, Palm Beach, las Islas Vírgenes o una casa campestre de Les Wexner, todas propiedas que pertenecieron a Epstein. Quien las instaba a satisfacer los deseos sexuales del magnate era Ghislaine. Ella las elegía, las reclutaba, les indicaba qué hacer y muchas veces participaba del abuso. También las entregaba a los poderosos e influyentes por orden del financista.
La residencia oficial de esta mujer de 58 años detenida este jueves, quedaba en Nueva York. Era una casona de cinco plantas que compró una sociedad desconocida pero que tenía su domicilio en las oficinas de su ex. La casa quedaba a diez cuadras de la mansión de Epstein y está valuada en más de 5 millones de dólares.
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