La fiscal regional de Rosario, María Eugenia Iribarren fue desplaza de su cargo en la fiscalía de Rosario por la intervención de la fiscal general María Cecilia Vranicich. Matías Merlo será quien reemplazará a Iribarren en su cargo en la ciudad, sin embargo la fiscal apartada seguirá a cargo de los demás distritos como Cañada de Gómez, Casilda, Villa Constitución y San Lorenzo.
La resolución se aplicó al cabo de que se realizara un monitoreo durante 90 días sobre el Ministerio Público de la Acusación, cuando los fiscales Pablo Socca y Miguel Moreno acusaron a Matías Edery de tener una relación sospechosa con su informante, Mariana Ortigala, una mujer vinculada a la banda de Los Monos.
Según la fiscal Vranicich, las principales razones para intervenir el MPA son, por un lado las diferencias existentes en la fiscalía; y por otro la imperiosa necesidad de «restaurar la cohesión interna institucional, reordenar los circuitos y procesos de trabajo de fiscales y empleados, y unificar el registro de la información».
Asimismo, también aparece como un punto clave de la intervención, el hecho de que Iribarren ignorase en varias ocasiones las órdenes de Vranicich en torno al caso de Edery. Como la vez que se le exigió que el fiscal acusado sea trasladado a otra unidad.
