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sábado 20 de abril del 2024

¿De qué se acusa al policía que mató a un ladrón en Caminito?

La mañana del viernes 8 de diciembre el turista estadounidense Frank Joseph Wolek fue apuñalado en la esquina de Olavarría y Garibaldi, en el barrio porteño de La Boca, a pocos metros del paseo turístico de Caminito. Según informaron voceros oficiales, dos muchachos intentaron robarle y, cuando él puso resistencia, le dieron 10 puñaladas en el pecho, dejándolo al borde de la muerte.

Luego de perpetuar el hecho los agresores salieron corriendo de la escena del crimen y uno de ellos Pablo Kukok, de 18 años, fue retenido por transeúntes a tres cuadras del lugar, en Irala y Suárez.  Con el asaltante sin capacidades de escapar se hizo presente Luis Oscar Chocobar, un policía de Avellaneda que estaba vestido de civil, franco de servicio.

En este punto de la historia es donde el caso se complica. Según pudo averiguar RosarioNuestro los investigadores manejan dos versiones encontradas sobre lo que ocurrió luego. Chocobar asegura que el joven retenido hizo un gesto que a él le hizo sospechar que estaba armado y, ante esta situación, sacó su arma reglamentaria y lo baleó. Sin embargo la Fiscalía especula con la posibilidad de que Luis haya disparado sin identificarse, sin cumplir con el protocolo estipulado para disparar un arma.

Lo que si esta claro es que producto de las heridas que le propició Chocobar, Kukok falleció luego de agonizar cinco días en un centro de salud.

Por estas suposiciones es que el policía estuvo detenido en diferentes penales porteños y la Justicia lo acusó de exceso de legítima defensa.

Aquí es donde comenzó la polémica; porque en medio de la investigación Chocobar recibió un fuerte apoyo desde el Poder Ejecutivo. Cristian Ritondo, Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, apoyó el accionar del uniformado, cuestionando en forma implícita el accionar de los fiscales.

Incluso hoy  Chocobar fue recibido en la Casa Rosada por el propio Presidente Mauricio Macri.