Luego que Lionel Messi consiguiera su séptimo Balón de Oro, en una cifra bestial de distinciones, surge la pregunta acerca de cuántos hubiese ganado Diego Armando Maradona si la revista France Football le hubiera dado a los futbolistas no europeos la posibilidad de ser elegidos desde la creación del premio en 1956 y no desde 1995.
El astro argentino recibió dos honoríficos, que tuvieron ambos un triste destino. Sin embargo, entre sus años de mayor brillo individual y de más cantidad de logros colectivos, de 1985 a 1990, se cree que al menos podría haberse quedado con tres de estos trofeos y competido en la terna cada año.
Si bien Maradona fue considerado por la prensa y por el mundo del fútbol como el mejor jugador del mundo o uno de los mejores ni bien empezó a desparramar su talento con la camiseta de Argentinos Juniors, logró más visibilidad con el pase a Barcelona pero la definitiva consagración fue en el Napoli y con la selección argentina en el Mundial México 86.
Con el título mundial, donde el Pelusa fue figura indiscutida de esa copa, no había otro nombre más merecedor para el Balón de Oro de 1986 que el 10. Pero claro, las reglas de este premio lo privaron y quedó en manos de uno de los ganadores más insólitos: el ucraniano Igor Belanov, que había ganado la Recopa de Europa con el Dinamo de Kiev y marcó cuatro goles para su selección en la Copa del Mundo.
También había méritos suficientes para que Maradona ganara el Balón de Oro 1987, ya que con una temporada notable llevó al humilde Napoli a ganar la Serie A de Italia. Ese año el oficial quedó en manos del holandés Ruud Gullit.
Algunos especializados afirman que le hubiese correspondido un tercer Balón de Oro, el de 1990, donde Diego obtuvo su segundo scudetto con el conjunto napolitano, además de ser subcampeón del mundo con Argentina, que cayó 1-0 ante Alemania en Italia. El teutón Lothar Matthaus se quedó con la distinción.
¿Qué pasó con los Balones de Oro honoríficos de Maradona?
Tres años después de recibir el premio al Mejor Jugador de la Copa del Mundo 1986, para resarcirlo por no recibir el Balón de Oro oficial, el trofeo fue robado del Banco della Provincia de Nápoles, junto a una gran cantidad de objetos valiosos entre los que figuraban varios relojes de lujo. Luego, se supo que Diego se contactó con la mafia italiana para intentar recuperar el balón, algo que no pudo ser posible ya que descubrieron que había sido fundido.
En 1995 le dieron el Balón de Oro, al igual que a Pelé, por los que les hubiesen correspondido si la regla hubiera sido distinta. Sin embargo, un incendio en la casa de su papá don Diego en Villa Devoto, ocurrido en julio de 2014, causó la pérdida de varias reliquias de Pelusa; entre ellas, el Balón de Oro. «No quedó nada», sentenció en su momento el entorno del Diez. Fue el año pasado que surgió la chance de conseguir una réplica: la revista se contactó en octubre de 2020 para realizarle una entrevista y Maradona puso como condición recuperar su premio. Pese a haber expresado primeramente su negativa por ser algo que nunca habían hecho, terminaron accediendo. Pero el 25 de noviembre ocurrió lo que nadie quiso: Diego falleció. Y el Balón de Oro extra jamás viajó.
