Comenzó el 22º cruce para rendir homenaje a la Gesta que realizó el General Don José de San Martín en 1817, con su Ejército Libertador para conseguir la libertad de Chile y Perú. El padre Juan Pablo Sancho, acompañante de una de las columnas del viaje realizado por la Asociación Cultural Sanmartiniana Cuna de la Bandera dialogó en el programa Mientras la Vida Va por Radio Mitre Rosario
«Salimos bien el sábado por la mañana, nublado, eso ayudó mucho porque la zona es muy abierta y el sol es muy fuerte» fue lo que dijo el padre tras salir en la 22º edición del cruce. Más cerca del final de la cabalgata, comenzó a lloviznar: «Tuvimos que ponernos los pilotos y frenarnos antes para almorzar en Ranchillos. El destino era llegar hasta Picheuta pero finalmente almorzamos en Ranchillos».
Luego, tuvieron que volver hacia el Regimiento debido a las lluvias y posteriormente salieron desde allí a través de un camión hasta Polvareda, para recontinuar desde ese lugar, tanto la infantería como los que iban montados.
«Es algo muy bonito, a mi siempre me han gustado las montañas. y cruzar en honor al General San Martín, es como que hace de la montaña algo más humano», afirmó el padre acompañante de una de las columnas del cruce.
«Uno va rastreando la grandeza de las montañas y la grandeza de los hombres y lo vas sintiendo. Cuando llovía el sábado era más consciente de lo que habían hecho, lo que hicieron tanto en la Independencia como en Malvinas». La Asociación siempre lleva Veteranos de Guerra de Malvinas para que transmitan sus vivencias y pueda seguir viva esta llama patriótica, gesta que puede ser comparada con el Ejército Libertador. Este año tendrá la particularidad que llevarán una placa del “soldado desconocido” que estuvo en el Cementerio de Malvinas. La misma será trasladada en una cureña arriba de una Mula para ser depositada en el Cristo Redentor a 4200 msnm.