Luego de que se dio a conocer la autopsia a Débora Pérez Volpin y que se confirmó que su fallecimiento fue por una perforación en el esófago, el abogado Diego Pirota y Enique Sacco, viudo de la periodista, brindaron una conferencia de prensa. El abogado sostuvo que Pérez Volpin «murió por una perforación instrumental del esófago que le provocaron en la clínica La Trinidad». También lanzó duras críticas al centro médico y al juez Gabriel Ghirlanda, quien presentó su renuncia ayer.
Diego Pirota afirmó: «La clínica le mintió a la familia. Ella no tenía ni una úlcera, ni hepatitis, ni nada de lo que dijo la clínica». Agregó que los allanamientos tardaron en ser ordenados, por lo tanto, el endoscopio usado para el estudio en el que Débora murió nunca fue hallado.
El allanamiento se realizó tres días después del fallecimiento de la periodista y el equipo que se encontró no era el que se había utilizado para la endoscopia. El abogado acusó al juez de permitir que «se pierdan pruebas concluyentes».
