Un grupo de profesionales de psicología la UBA llevaron adelante una encuesta sobre salud mental para la población tras cuestionarse acerca de los malestares propios del encierro y efectos sobre la subjetividad.
“Vemos que predomina la mirada médica sobre el Covid-19 y ello nos motivó a visibilizar la importancia de la salud mental en este momento de emergencia sanitaria” explica la licenciada en Psicología María Fernanda Rodríguez.
“Queremos realizar un aporte desde nuestra profesión en este contexto de pandemia, para muchos doloroso, desde nuestra profesión con una perspectiva desde los derechos humanos, nuestro proyecto es voluntario y es una forma de aportar desde lo público”.
Los objetivos de la investigación
“La finalidad de este trabajo es conocer cómo se desarrollan algunos aspectos de la vida cotidiana debido al aislamiento preventivo y obligatorio en el contexto de la pandemia del Covid-19. También, sobre qué emociones emergen en esta situación de período e indagar cómo impactan las emociones generadas por este contexto en la continuidad de proyectos personales” detalla la licenciada también en Psicología, Erika Gonzalez.
Cómo avanzar con los proyectos personales
Ante la imposibilidad de poder circular libremente por la vía pública y trasladarse sumado al cierre de negocios, la escuela y los centros comerciales, muchas personas han tenido que interrumpir o frenar sus proyectos personales . Lo que nos preguntamos en la encuesta qué emociones surgen y si eso afecta a los proyectos personales.
“El ser humano es interdependiente, es decir, necesita del contacto con los otros. Ante esta situación es fundamental sostener los vínculos donde se ponga en juego la mirada y la escucha y poder tener un mayor despliegue de sentimientos y emociones” explica la licenciada.
“Si estamos en convivencia tener un manejo de espacios y silencios. Es conveniente sostener espacios propios y darle lugar al de los otros”.
“Sostener una rutina diaria, darse un espacio para el ocio, explorar intereses nuevos o postergados son otros de los recursos que pueden ayudar a sentirnos mejor”.
Consideramos a la salud mental como un proceso no sólo psicológico, también es histórico, socioeconómico, cultural y biológico. Algunas formas de protección puede ser brindar información científica y validada, generar grupos de contención, como así fortalecer redes comunitarias.
Para tener en cuenta…
- Leer, hacer actividades que gratifiquen, mantener espacios individuales son conductas que ayudan a pensar en estrategias positivas.
- Recurrir a nuestros afectos a través de los dispositivos tecnológicos.
- Pensar qué acciones pueden contribuir en nuestros proyectos desde casa aunque sean limitadas: si tengo un negocio alimentar las redes sociales, el WhatsApp, navegar en busca de nuevos recursos, buscar asesoramiento sobre los préstamos del gobierno, mantener el contacto con los clientes a través de email y redes sociales, por ejemplo.
- Si es necesario, recurrir a la terapia por videollamada se puede trabajar como en forma presencial y puede ser una buena contención para hablar de temores, angustias, inseguridades propias de este contexto.
Toda crisis puede ser una oportunidad
“Estamos atravesando una crisis que puede pensarse como un motor para el cambio. Tenemos que esperar, se habla de un cambio trascendental que lo veremos a posterior”.
“Las medidas actuales a causa de la pandemia van a terminar aunque no tenemos certezas de fechas sabemos que durará un período. A partir de allí veremos cómo se presenta la realidad y se podrán pensar nuevas estrategias para concretar los proyectos personales si las que tenemos no se adaptan al contexto” concluye la especialista.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión