A partir de este sábado y luego que provincia se adhiriera a la medida de Nación de regresar por 9 días a un confinamiento total, los comercios que no sean esenciales tendrán que cerrar sus puertas. Los negocios del centro de Rosario se verán afectados y desde la Asociación de Comerciantes de Calle San Luis se refirieron a la situación crítica que atraviesan por las anteriores restricciones, a la que se sumará este regreso a fase 1: «Muchos están al borde de la quiebra».
Sobre lo que representa este nuevo cierre total de la actividad, el referente del paseo comercial de calle San Luis, Miguel Ángel Rucco, indicó: “Nos llegó alguna idea de movilización, medida de fuerza, a la que nosotros no nos vamos a plegar, por eso esperamos la comunicación que estamos reclamando. Las certezas son pocas, no podemos manejar tanta incertidumbre y no sabemos qué vamos a hacer mañana (sábado)”.
“Venimos hace un tiempo de caídas profundas de las ventas y no sabemos qué vamos a hacer mañana. La comunicación a veces viene por flyer, por Twitter, por Instagram, que no es la manera, sobre todo cuando tienen dirigentes que siempre respetaron la autoridad y se acataron las decisiones que se tomaron”, continuó el comerciante y agregó: “Estamos esperando información concreta para poder comunicar a nuestros colegas, a los empleados y a nuestra clientela”.
Consultado acerca de cómo podrán subsistir a esta medida, afirmó: “Ya no hay margen para volver a invertir ahorros, no hay margen para seguir aguantando, hay muchos que están al borde de la decisión de la quiebra, de tener que bajar la persiana. Estas indecisiones, falta de certezas para tomar la determinación de hacerlo o no, o de comprar y seguir apostando al negocio, nos pone en una situación más complicada que la del año”.
Por otra parte, Rucco se refirió a la complejidad que tienen para recibir una asistencia económica: “Es casi imposible poder acceder al Repro, por eso pedimos algún otro tipo de ayuda económica, que algún funcionario se dé cuenta que los tiempos de la política no es el mismo que el de las pymes y los comercios”.
“Al no haber circulación, las ventas son mínimas. Es una situación muy angustiante, entendiendo que seguimos con las mismas obligaciones y nadie piensa que el comercio la está pasando muy mal”, concluyó el referente de los comercios de uno de los paseos neurálgicos de la ciudad.
