La etapa de confinamiento total que duró 9 días, llegó a su fin este domingo y uno de los focos principales estuvo puesto en la circulación vehicular, que estuvo prohibida para todos aquellos que no son esenciales o que no tuvieran cómo justificarla. Hubo cerca de cinco mil controles que arrojaron un saldo de 100 vehículos remitidos al corralón por imposibilidad de los conductores de avalar su tránsito por las calles rosarinas.
“Como balance de la semana de restricciones que acaba de concluir, la Secretaría de Control y Convivencia, en conjunto con fuerzas de seguridad provincial y federales, realizaron operativos para poder controlar la circulación vehicular. Se realizaron cerca de 5 mil controles con un saldo de 100 remisiones, solamente de aquellos vehículos que no pudieron justificar su presencia en calle”, aseguró Carolina Labayru, secretaria de Control de la Municipalidad.
A su vez, la funcionaria se refirió a las consecuencias que traen las remisiones al corralón: “Los vehículos no solamente son trasladados al corralón municipal, sino que deberán ser liberados por un fiscal para poder ser retirados del corralón”.
Puntualmente acerca de las actuaciones en este último fin de semana, Labayru contó: “Se realizaron controles de alcoholemia con seis casos positivos, uno de ellos con 1,48 gramos por litros de alcohol en sangre. En cuanto a los comercios, se realizaron más de 150 inspecciones, 45 de ellas tuvieron que ver con supermercados. El saldo final fue de cuatro clausuras de comercios, algunos por no estar habilitados para funcionar y otros por no respetar el horario de cierre”.
