El local de juego Bowling 10, ubicado en Córdoba 864, cerró sus puertas luego de que falleciera su dueño días atrás. En este contexto, su hija decidió no continuar con la actividad y cinco trabajadores son afectados por esta medida, a quienes quieren pagarle solo el 50 por ciento de la indemnización correspondiente a sus despidos.
Después de cinco días de duelo, el bowling cerró de manera imprevista. El Sindicato Único de Trabajadores de Espectáculos Públicos confirmó que no hubo aviso previo por parte de la hija de Genandio Diez. La referente del gremio, Marta Sánchez, comentó que los empleados recibieron un telegrama que solo les informaba el porcentaje de su indemnización.
Bowling 10 llevaba más de cuatro décadas en funcionamiento sobre peatonal Córdoba entre Maipú y Laprida. A su vez, sostienen que “la dueña pretende realizar un buen negocio inmobiliario” con esa propiedad.
