La información fue ventilada por voceros oficiales este martes por la mañana, cuando Cristian Mario Gonzalez ya llevaba, al menos 48 horas preso, luego de pasar cinco años en las sombras con pedido de captura por la causa más importante de la historia de la mafia rosarina. Lo buscaban como miembro de la asociación ilícita de Los Monos. También estaba señalado como el homicida de Lorena Ojeda —un truculento caso por el cual estuvo detenido el abogado Marcos Cella—. Sin embargo, de acuerdo a lo que explicaron fuentes del caso, el fugitivo estaba escondido en Villa Moreno, ante la vista de propios y ajenos.
Operativo y captura
El sábado a la noche y el domingo por la madrugada la División de Drogas de la Policía Federal de Rosario realizó diez allanamientos en la ciudad, con el objetivo de desbaratar una banda que se dedicaba a la venta de drogas.
En los procedimientos, que fueron ordenados por el Juzgado Federal Nº 3 los pesquisas incautaron dos ladrillos de cocaína compactada, con un pesaje total de 2 kilogramos. Elementos que suelen utilizarse para cortar esa droga —como creatina y creatina monohidratada—. Tres balanzas, precintos plásticos y un cigarrillo de marihuana. También secuestraron 242.350 pesos, tres autos, una moto, diez celulares, dos televisores smart, dos tablets, tres notebooks, 32 cartuchos de escopeta y documentación de importancia para la causa.
Pero lo más importante es que, junto a otro grupo de personas, cayó Cristian Mario Gonzalez. Él estaba prófugo de la Justicia provinicial señalado en dos resonantes causas. Por un lado estaba acusado de formar parte de la asociación ilícita por la cual fueron juzgados y condenados los principales integrantes de Los Monos. También lo señalaban por el homicidio de Lorena Ojeda.
Tubi, el abogado y la mala puntería
El homicidio de Lorena Ojeda está estrechamente relacionado con Ariel «Tubi» Segovia —el presunto narcotraficante asesinado hace pocos días en la cárcel de Coronda—.
A «Tubi» se lo acusaba de ser el autor intelectual de la muerte de Lisandro Fleitas, un joven que fue asesinado a tiros el 10 de noviembre de 2016 en la esquina de Callao y Míster Ross. Diferentes investigadores presumen que los tiros no eran para Lisandro, sino para Lautaro «Lamparita» Funes —hermano de Ulises, Jonathan y Alan—, quien salió ileso.
También estaba señalado por la muerte de Jonatan Rosales. El caso tuvo lugar el 22 de junio de 2016 en Padre Giaccone al 1400. Jonatan caminaba junto a Brisa, su pareja, que aquel día lo reconoció como uno de los pistoleros y se puso a disposición de la Justicia para declarar en su contra.
De acuerdo a lo que especulan los pesquisas, «Tubi» mandó a matar a la novia de la víctima —por este caso estuvo detenido el abogado Marcos Cella— y los tiradores volvieron a errar. El ataque tuvo lugar el 16 de diciembre en Vera Mujica y Rueda y en vez de darle a Brisa, los sicarios asesinaron a su hermana Lorena Ojeda. Por este hecho Cristian Mario Gonzalez fue señalado como el autor de los disparos.
¿Oculto?
«Estaba vendiendo droga en Villa Moreno. Se ve que no se tuvo que esconder mucho para burlas a la Policía», aseguró una alta fuente del caso.
