Las festividades de fin de año pueden resultar contraproducentes si es que no se tienen los recaudos necesarios para evitar accidentes en la visión.

El corcho de las sidras, champagne y otras bebidas gasificadas pueden transformarse en proyectil que suele alcanzar hasta 80 kilómetros por hora. Por eso, a la hora de descorchar hay que tener mucho cuidado con los ojos para evitar traumatismos que pueden llevar a la pérdida visual permanente.

En este marco, la Cámara de Medicina Oftalmológica (CAMEOF) realizó algunas recomendaciones para prevenir un trauma ocular y otros contratiempos en plena celebración:

Espumantes: ¡Cuidado al destapar las botellas!

Para destapar una botella de cualquier espumante, la CAMEOF recomienda hacerlo con sumo cuidado para evitar accidentes. Cuando el ojo recibe un impacto directo del proyectil (corcho), sufre un acortamiento anteroposterior y esta brusca deformación puede generar:

• Retroceso del ángulo iridocorneal que puede evolucionar en un glaucoma de difícil tratamiento.
• Desinserción del iris.
• Desinserción del cristalino (luxación).
• Catarata traumática.
• Ruptura de la inserción del vitreo produciendo desgarros de retinas, diálisis o desgarros gigantes de complejo tratamiento y microcirugías.
• Edema de mácula con o sin agujero macular que compromete la capacidad visual.
• Avulsión del nervio óptico: grave secuela de un traumatismo que probablemente no puede tratarse y deje secuelas permanentes.

SOS pirotecnia sin control

Más allá de los accidentes producidos por los corchos, también se registran en esta época muchos sucesos provocados por la pirotecnia.

La CAMEOF advierte que las lesiones provocadas por la pirotecnia pueden ser vanas o dejar secuelas de por vida. Por eso, para evitar complicaciones se indica:

• El uso de anteojos de policarbonato que se consiguen en cualquier ferretería a un costo muy accesible.
• Observar a los fuegos artificiales desde una distancia prudencial. En el caso de las cañitas voladoras se recomienda no usar latas para sujetarlas, ya que estas se pueden disparar en sentido opuesto y causar lesiones.

Las quemaduras causadas por los fuegos artificiales en la visión suelen ser superficiales, pero pueden causar:

• Úlceras corneales que mejoran con pocas horas de oclusión (tener el ojo tapado)
• Graves lesiones que ponen en peligro la integridad ocular.