Este miércoles se registró la gran sorpresa de Wimbledon: el último campeón y más ganador de la historia del certamen con ocho títulos, Roger Federer, cayó en un maratónico partido (4h.13′) con el sudafricano Kevin Anderson.
La proeza de Anderson se volvió aún mayor teniendo en cuenta que comenzó perdiendo los dos primeros parciales por 6/2 y 7/6 (5) y todo indicaba que el suizo se encaminaba con tranquilidad a las semifinales.
Sin embargo, el sudafricano se recuperó, batalló y se quedó con los siguientes tres sets: 7/5, 6/4 y 13/11 para lograr un triunfo épico, de los más importantes de su carrera.
En semifinales, Anderson se medirá ante el ganador del choque entre el canadiense Milos Raonic y el norteamericano John Isner.
