En la mañana de este martes se llevó adelante, en la sede de ministerio de trabajo provincial, la última audiencia conciliatoria entre los trabajadores aceiteros y la empresa Cargill. A la salida del encuentro, el secretario general del Sindicato de Aceiteros de Rosario, Adrian Dávalos, aseguró que no hubo nueva propuesta y lamentó el fracaso de las instancias de diálogo, tanto a nivel nacional como provincial. “El jueves a la hora cero vence la conciliación y no nos queda otro camino que comenzar una huelga por tiempo indeterminado”, añadió.
Desde la mañana los trabajadores se concentraron en la esquina de San Lorenzo y Ovidio Lagos para acompañar a los dirigentes en la reunión conciliatoria. Por su parte, la firma sólo envío a un apoderado.
El representante de los aceiteros consideró que la empresa fue «favorecida” por el contexto político y busca adoctrinar a los trabajadores. “El conflicto arrancó hace más de un mes cuando, en enero, Cargill decidió despedir 45 trabajadores (de la planta de Alvear) y uno en Bahía Blanca sin ninguna razón porque es la empresa que más factura en el país: 100 mil pesos por minuto”, dijo sobre cómo se desencadenó el problema.
“A la víspera de la cosecha nos plantamos para que no entre un solo grano a las plantas de Cargill en la zona. La protesta será dentro y fuera de la fábrica hasta lograr la reincorporación de los trabajadores”, advirtió Dávalos y agregó: “Ellos vienen por todo y nosotros vamos a resistir hasta el final porque está en juego nuestro familia y nuestra dignidad”.
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