Se cumple un año de la tragedia en la ruta 33 que dejó 13 víctimas. Fue el 24 de febrero del 2017 que más de 150 bomberos intentaban rescatar a decenas de personas atrapadas entre los barrotes de dos colectivos destruídos en la ruta que comunica Rosario con Pérez y Zavalla.
Tras el hecho, hubo diversas hipótesis para intentar establecer el por qué de semejante siniestro y fue la gente, la que poco a poco puso un manto de claridad, revelando las falencias de la empresa que hasta ese año era la encargada del transporte de miles de personas.
Vehículos en mal estado, roturas y falta de mantenimiento y control, fueron algunas de las falencias que los usuarios describieron sobre “Monticas”. A la vez, todos coincidieron en que la “tragedia” era “un final anunciado”.
Como consecuencia, ese mismo mes, Comisión Evaluadora de Transporte definió la “mejor” propuesta para cubrir ese corredor, entre otros, otorgándole de esa manera el servicio a la UTE conformada por América S.R.L – Azul S.A.T.A, constituyéndose así una nueva línea amarilla con banderas identificatorias, bajo el nombre de 33/9.
El servicio, comenzó a funcionar el 8 de abril y desde el día cero, “los colectivos amarillos” encargados de recorrer la falta ruta 33 generan, aún hoy, una gran preocupación a los usuarios.
