«Visité Rosario y sobreviví». Una taza con esa frase se vende como souvenir en una farmacia ubicada en la terminal de colectivos, en medio del recrudecimiento de la violencia en la ciudad, que cosecha 178 crímenes en lo que va del año.
«Ingresó hace unas dos semanas, sale 2100 pesos», contó el empleado del local que la comercializa y aseguró que el público tiene distintas reacciones frente al objeto. «Algunos se ríen, otros dicen que está espectacular y hay quienes la compran».
En tanto, reconoció que resulta impactante toparse con la taza, sobre todo para quienes son oriundos de Rosario. «Para los que somos de acá y vemos cómo está todo el tema del peligro en la calle puede ser un poco fuerte». De todos modos, consideró que «hay que tomarlo con gracia para divertirse un poco».
No es el único modelo que ofrece el lugar. También hay otros, entre los que se destaca uno con el mapa de la ciudad pintado de rojo, el color de la sangre, en un contexto de criminalidad atroz, donde la sangre se convirtió en parte del paisaje urbano.