El rosarino Éver Banega brindó una conferencia de prensa este viernes en la cual se despidió oficialmente del Sevilla, donde jugó cinco temporadas y consiguió en tres ocasiones el título de la Europa League, la última la más reciente en la pasada temporada en la final contra el Inter de Italia. Sobre el final y cuando empezó a hablar de la importancia del apoyo de su familia, se quebró en llanto y no pudo disimular las emociones.
“Y por último, a mi mujer e hijos por acompañarme en esta aventura”, alcanzó a decir el mediocampista de 32 años aún con claridad en su voz, justo antes que lo invada un mar de lágrimas. “… En esta aventura tan linda que vivimos en Sevilla, sin ellos tampoco sería posible todo lo que he logrado”, continuó el futbolista.
Banega, que pasó por Newell’s, club de sus amores en 2014, continuará su carrera en Al Shabab de Arabia Saudita y les dejó un último mensaje emotivo a los hinchas del conjunto andaluz: “Ahora sí me despido: gracias por ser parte de tu historia, por dejarme ser parte de tu historia, les deseo el mayor de los éxitos y les aseguro que a donde vayan tienen hasta siempre mi sello”.
