Luego de los polémicos dichos de Roberto Pettinato acerca del acoso sexual, quien manifestó que «el 50% de los casos sucede porque el otro tarda mucho en decir que no quiere cog…con vos», varias mujeres que trabajaron con él relataron públicamente el trato laboral del conductor, que percibieron como desubicado y abusivo. Carmela Bárbaro, Josefina Pouso y Fiorella Sargenti expusieron sus experiencias.
Carmela Bárbaro, ex compañera de Pettinato, detalló en el aire de Los Ángeles de la mañana cómo fueron sus vivencias con el músico detrás de las cámaras: «No puede distinguir el acoso y tampoco lo puede distinguir en su vida personal y ese es el problema. Porque a él también se le ha ido alguna vez la mano con esta cosa que él cree que es insistidora y divertida. El problema que tiene es que él cuenta lo que no entiende. Hace chistes sexuales, chistes que no corresponden».
Y continuó: «La mano también se le va. Se le va la mano, se le va la lengua. No puedo decir que sea un tipo acosador en los términos que estamos hablando ahora de violencia de género. Pero es un tipo que atrasa, de esas personas que creen que te pueden hacer un masajito… A mí no me tocás. Ni me hacés masajito, ni me tocás, ni me hacés un mimito».
«Yo trabajé con él y tuve esta situación que él dice. En el mismo momento, le dije ‘a mí no, a mí no’. Quiso hacer un chiste y le dije ‘conmigo no, no jodemos, no somos graciosos, mi cuerpo está acá y vos estás allá’. Y eso paró. Por eso yo no te puedo decir que es un tipo que insista o que vaya contra la voluntad de una mujer. Pero sí reconozco que lamentablemente muchas minas están acostumbradas y se dejan porque creemos que es parte de nuestro laburo, porque creemos que está bien…», finalizó la panelista.
Por su parte, Josefina Pouso, quien compartió el ciclo Un mundo perfecto de 2011 con el ex Sumo, se manifestó vía Twitter: «¡Pero de haberlo sabido antes, che! Siempre supe que fue culpa mía. Igualmente creo que él está en el otro 50% que aunque le digas que no, sigue como si nada hubieses dicho o peor». La modelo había contado en su momento detalles acerca de lo vivido. En ese sentido, señaló este lunes al sitio Clarín.com: «Yo hablé antes y no me creyeron. No la pasé bien y me tuve que ir. Duré tres meses en un programa y tuve que seguir un juego que no me gustó seguir».
Fiorella Sargenti, ex compañera del animador en Rock and Pop, fue la tercera en sumarse a las acusaciones contra el humorista y repudiar su modo de manejarse en el ámbito laboral.»Ojalá nos hubieran avisado antes a las chicas de Rock and Pop, así nos evitábamos los comentarios groseros (al aire y fuera), los manotazos a esquivar, los besos en el cuello a evadir y todo eso jamás consensuado o requerido», expresó la periodista en su cuenta de Twitter.
«Cuando frente a estos casos algunos dicen “por qué no hablaron antes?” suele ser porque como nadie reacciona, una tiene miedo de que la echen, ser la conflictiva, etc, lo naturaliza. En el caso de comentarios totalmente desubicados al aire, pocos oyentes lo señalaban, incluso», agregó la periodista.
Por último, la también columnista del ciclo radial Basta de Todo reflexionó: «En general en el laburo estos desagradables también son maltratadores con los pibes, pero ellos muchas veces no dicen nada porque se la tienen que bancar, porque son chabones, ‘no seas maricón’ y blah. Eso también es machismo. Gracias a todos los que escribieron».
Si bien Pettinato pidió disculpas en declaraciones televisivas tras el escándalo, la polémica alrededor de su figura parece prometer nuevos capítulos. En las últimas horas, Malena Pichot aseguró que lo del saxofonista «se sabía desde hacía años» en el ambiente artístico.
