El tradicional Vía Crucis del Padre Ignacio por Viernes Santo convocó a alrededor de 220 mil fieles en las calles de barrio Rucci. La multitud caminó con velas encendidas para seguir la representación de los últimos momentos de Jesús en la tierra.
Durante el encuentro, Ignacio pidió por la paz y seguridad en Rosario y señaló: «Si queremos superar la violencia tomemos la decisión de educar a los hijos como corresponde. La mejor forma es que no falte la corrección paternal. Ese es el mejor camino para la paz».
Desde la Municipalidad, hubo un fuerte operativo de seguridad. Unos 300 agentes, entre policías y gendarmes, estuvieron en el lugar para garantizar el orden. Además, hubo cortes y desvíos de tránsito en las inmediaciones de la parroquia Natividad del Señor.