Una ex militante de La Cámpora denunció a la agrupación de encubrir y silenciar abusos. La denunciante Stephanie Calo habló en TN Central con la periodista rosarina Luciana Geuna y contó detalles de las experiencias que le tocaron vivir. La mujer acusó que no se sintió protegida por sus compañeros cuando se supo lo que le ocurrió con su pareja: «Siento que a veces pesa mas cuidar una bandera, que cuidar a las mujeres», expresó.
En la cuenta de Facebook Unidas Jamás Vencidas habían publicado relatos de la denunciante en donde revelaba algunos detalles del calvario que le tocó vivir: «En su máximo estado de locura llegó a tirarme el auto encima para no dejarme pasar, me zamarreaba dejándome moretones en los brazos, me pegaba patadas y empujones, es una persona conflictiva todos los días buscaba discutir por cualquier cosa se enojaba y me gritaba en cualquier parte».
Ya con una cámara de televisión enfrente, Calo se animó a hablar sobre su historia: «Desde el primer momento teníamos una relación muy intensa. Nos veíamos todos los días. El podía hacer uso y disposición de mi teléfono. Si yo no se lo permitía, él pensaba que algo le estaba escondiendo».
«Lo denuncié por abuso. Una vez lo vi en mi casa, sacado, violento. Le digo que me espere. Me subo al auto, hacemos diez cuadras, se queda dormido y chocamos. El se lastima la clavícula. Como iba atrás salí despedida y me lastimé la mano», añadió en la entrevista.
Minuto a minuto, Calo fue comentando acerca de su situación. Dijo que el acoso sexual ocurrió tiempo después. Una vez que a ella la operaron, su pareja le insistió para tener sexo. Ella se opuso pero debió ceder: «No había caído en que me abusó hasta que voy a la oficina doméstica. Me preguntaron si estaba embarazada y le respondí que no sabía. Le conté lo que pasó y el hombre me dijo que eso era un abuso y si lo quería denunciar. Le dije que sí».
Sthepanie señaló a La Cámpora de no aplicar el existente protocolo anti-violencia que tiene la agrupación y de mirar hacia un costado sobre su caso: «Casi nunca se aplicó ese protocolo. En otros casos se encubrió. Como en el mío, ya que los 15 días que estuvo bajo las sombras el hecho, me podía haber matado».
«Tanto nos quejamos que recibía violencia por parte de los medios, de la gente y ¿qué estamos haciendo? Terminamos siendo lo mismo: no cuidamos a las pibas», agregó en modo de reclamo.
Por último, cuando Luciana Geuna le consultó cómo se sentía, la entrevistada sentenció que siente «impotencia» y pidió que su caso «no quede impune». «Puede matar a una mujer y la Justicia no está haciendo nada», cerró.
