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martes 23 de abril del 2024

Claudio Perrin, un rosarino premiado en New York

Su timbre de voz denota cierta calidez. Atiende el celular en el segundo llamado. Tras el intento fallido, alega que se estaba bajando de un taxi y que por eso no pudo contestar. Este rosarino, que comienza a erigirse en la escena del espectáculo internacional, parece desbordado por la explosión mediática surgida alrededor suyo en los últimos días. Es Claudio Perrin, el cineasta que ganó el premio a mejor filme de ficción en el Broadway Film Festival por su película «Umbral», a la que el linchamiento de David Moreira le sirvió como disparador argumental.

 

«La verdad que estoy sorprendido. Por más que uno tenga confianza en la película y cariño con lo que se ha logrado, esto de recibir premiaciones no deja de ser sorpresivo. Está bueno porque uno siente que va por el camino correcto. Los premios son un incentivo para seguir adelante», detalla Perrin con un tono suave, para hablar de su reciente galardón nada menos que en la meca del cine internacional.

Una de las escenas de la película.

-¿Cómo es hacer cine en Rosario?

– No es imposible, es dificultoso. Sobre todo por el tema de la financiación. Dependemos mucho de los concursos públicos, que no están abiertos todo el tiempo, más que nada acá en la provincia. A nivel nacional está el INCAA, que es mucho más engorroso. Creo que muchos realizadores no terminamos de comprender las formas de presentación ante el INCAA más que nada porque no somos parte de la industria. No tenemos esa gimnasia que tienen los realizadores de otros lados, sobre todo de Buenos Aires, de saber todos los vericuetos de presentación formal.

Perrin cuenta que él y su productora, que lleva el nombre de su hijo Zahir, se manejan con la modalidad de «plataformas» para lograr instalarse en los festivales. Y explica que gracias a la agilidad de esa dinámica es más sencillo llegar a mostrar sus obras en una multiplicidad de certámenes dado que «todo se hace on line».

En tanto, destaca que la pieza audiovisual premiada fue financiada mediante la práctica de crowdfunding, un ejercicio de financiamiento colectivo «donde diversos particulares aportan a proyectos artísticos».

-¿Por qué te inspiró el caso de David Moreira, el joven asesinado por sus propios vecinos en 2014 en barrio Azcuénaga?

-Me parece que fue bastante conmocionante. Tanto para mi en lo particular como por la repercusión que tuvo, no sólo a nivel local sino nacional. Produjo una especie de estado de ebullición generalizado, tanto a favor como en contra, que me llamó poderosamente la atención. A los realizadores, a los guionistas lo que nos llama la atención nos inspira para escribir un guión, para hacer una película. Además no olvidemos que el hecho trascendió las fronteras de Rosario. A partir de ahí, la semana posterior se produjeron una serie de hechos similares en distintos puntos del país, como la provincia de Buenos Aires y Córdoba.

A la hora de responder sobre el rol de los medios en este tipo de hechos Perrin, asegura: «Sutilmente incentivaron a pensar que no estaba tan mal la cuestión. Los medios funcionaron como una especie de reguero de pólvora que se enciende y no lo podés parar. Trataron de ser medianamente objetivos pero prendieron la mecha de gente que estaba a favor».

«Los medios funcionaron como una especie de reguero de pólvora que se enciende y no lo podés parar».

El flamante ganador, quien se formó con docentes como Héctor Molina y Gustavo Postglione, dirigió también  «Bronce», un relato sobre dos hermanastros que se dedican a robar epitafios de cementerios, cuyo estreno se llevó a cabo en 2013.