Previo a desarrollar la crítica pertinente a “THOR: RAGNAROK” quisiera realizar una breve reflexión introductoria. A mi humilde y desinteresado entender hay rasgos característicos que distinguen a los dos monstruos de la industria del cómic que quedan en evidencia al llevar estas historias a la pantalla. Si bien DC United (Wonder Woman, Batman vs Superman, Liga de la Justicia, etcétera.) tiene tramas argumentales más profundas y un cuidado estético de excelencia de sus obras, sus guiones suelen ser catalogados como densos y/o aburridos (a excepción de
su último estreno WONDER WOMAN, que roza la excelencia desde todos los aspectos que se la analice). En cambio, MARVEL (The Avengers, Iron Man, Spiderman, etcétera) tiene una búsqueda más superflua, preocupada más por entretener al espectador que por profundizar en las historias. Colores fuertes, escenas dinámicas y la utilización de gags son un sello de sus películas.
Desde hace tiempo, las películas de MARVEL lideran las taquillas con sus
historias de superhéroes y villanos, eso se sabe y no es una opinión sino una estadística fácilmente comprobable. Pero hay fórmulas que de tanto repetirse pueden perder el efecto de sus inicios. Y después de ver esta nueva superproducción del Dios del Trueno, quizás sea momento de parar la pelota y replantearse algunas cosas sobre el (ab)uso del humor en sus películas.
En esta nueva película de Thor -hijo de Odín y hermano de Hela y Locki-
brillantemente interpretado por el actor australiano Chris Hemsworth deberá arreglárselas para detener (¿o no?) el RAGNAROK, que es, en simples palabras, la destrucción de su Planeta: Asgard. La aparición de HELA, un ser cuya maldad, deseo de dominación y venganza la convierten en el objetivo a detener e impedir por el arrogante superhéroe blondo. En el medio, deberá convertirse en Gladiador, enfrentar a su amigo HULK y formar el equipo que lo lleve a impedir los planes de su malvada Hermana. En este breve párrafo puedo resumir el argumento principal, más allá de pequeños detalles que prefiero no revelar para no “spoilear” a quienes
deseen concurrir al cine.
Debo reconocer que las dosis de violencia y acción de la película resultan
entretenidas y están brillantemente filmadas pero la redundante utilización de gags humorísticos hace que se disperse el guión y algunas cuestiones fundamentales de la historia original (que usted puede leer en los cómics) se pierden en pos de la comicidad de sus personajes.
En cuanto al reparto, cabe destacar que a la plana mayor de lujo que viene desde las otras películas de la saga (Hopkins, Hemsworth, Hiddleston y Elba) se le suman dos actores que jerarquizan el elenco: Cate Blanchet y Jeff Goldblum (en el papel del “Gran Maestro”, particular tirano que reina una especie de circo romano interplanetario donde cae Thor por accidente). También Mark Ruffalo entendió a la perfección su rol dentro de la película, y lo cumple con suficiencia dando vida al Increíble HULK. Precisamente es esta arista que me impide hablar de una película
decididamente mala, ya que todas las actuaciones son sólidas y muy
convincentes.
No quisiera hacer pronósticos ni futurología sobre la recepción de esta nueva entrega de la saga porque mucho de lo que resulto exitoso en emisiones anteriores se repite: efectos especiales, peleas de seres extraordinarios, el bien y el mal. En definitiva, “THOR RAGNAROK”, seguramente recaudara millones y venderá mucho merchandising pero poco nos ha aportado a los que gustamos de ver una buena película.
Ficha técnica:
Calificación: Regular
Usa 2017 – 115 min – Acción / Aventuras
Dirección: Taika Waititi
Elenco: Chris Hemsworth, Tom Hiddleston, Cate Blanchett, Idris Elba, Benedict
Cumberbatch, Anthony Hopkins, Mark Ruffalo, Jaimie Alexander, Clancy Brown,
Jeff Goldblum, Sam Neill, Ray Stevenson, Tessa Thompson
