Representantes del Sindicato de Peones y de la cámara que agrupa a titulares de taxis, funcionarios de los gobiernos provincial y municipal, y concejales de la ciudad protagonizaron una reunión de emergencia para atender la crítica situación económica que vive el sector debido a las medidas de aislamiento obligatorio dictadas para combatir la pandemia del Coronavirus.
El concejal justicialista Eduardo Toniolli -que participó de la reunión junto a la presidenta del cuerpo legislativo local María Eugenia Schmuck- explicó que las autoridades recogieron la demanda de los taxistas «de gestionar ante Nación la posibilidad de incorporar al sector al Ingreso de Emergencia», y señaló que «lo que se logró rápidamente es que el gobierno provincial disponga de una cantidad importante de módulos alimentarios para brindarle a los choferes, y que el municipio ponga a disposición la logística necesaria para entregarlos en los próximos días». A eso se le suma la oferta de créditos blandos para los dueños de taxis por parte del Banco Municipal.
«Entendemos con las medidas tomadas por el gobierno nacional son correctas para enfrentar la pandemia», señaló Toniolli, aunque -aclaró- «traen daños colaterales sobre los que hay que trabajar para morigerar su impacto». Al respecto, el edil integrante de la Comisión de Servicios Públicos del cuerpo legislativo local, planteó que «la situación de lo taxistas es muy compleja: parte del personal es población de riesgo, y aquellos que pueden salir a la calle se encuentran con una baja enorme de la demanda, por razones obvias».
