Este martes continúa el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, asesinado hace tres años a la salida del boliche Le Brique en Vilal Gesell. Durante esta jornada pasarán por el Tribunal Oral Criminal N°1 de Dolores seis testigos. La mirada está puesta en la pericia realizada a la zapatilla que usó Máximo Thomsen, uno de los más complicados de los ocho acusados.
En primer lugar seguirá su declaración Pablo Laborde, instructor fiscal, quien participó de la reconstrucción del hecho y comenzó a brindar testimonio el lunes. A raíz de su extensión se decidió pasar a un cuarto intermedio.
Más adelante, será el turno de María Eugenia Cariac, criminalista, que aportará información sobre la zapatilla utilizada por Máximo Thomsen y la marca que quedó en el rostro de Fernando.
Después seguirán María Luján Elvira Molina, quien intervino en las pericias para establecer las medidas de los pies de los imputados y Haydeé Almirón, para brindar información sobre la pericia scopométrica.
Por último, declararán Sandra Ana Moreno Rodríguez, estuvo presente en una incautación realizada en la comisaría de Villa Gesell y David Larrosa, presenció la toma de la impresión plantar de los acusados.
