Ayer por la tarde, la ministra Patricia Bullrich recibió en su despacho a Carla Céspedes, agente de la Policía de la Ciudad que había sido traspasada de la Policía Federal. Era una suerte de presentación, un apoyo público con Infobae presente en la sala: Céspedes había sido absuelta por el Tribunal Oral Criminal N°14 por abatir a tiros a Ariel Santos, un motochorro que intentó asaltar junto a un cómplice el supermercado chino El Mundo en la esquina de Estivao y Ramos Mejía en Parque Centenario el 22 de diciembre de 2016 por la mañana.
Céspedes estuvo detenida una semana por el hecho, los pedidos de pena tanto de la querella del caso a cargo de la Defensoría General de la Nación y del fiscal acusador Fernando Klappenbach fueron duros: el fiscal solicitó cuatro años de cárcel e inhabilitación de por vida por el homicidio cometido «con exceso en el cumplimiento del deber», el mismo delito que se le imputa a Luis Chocobar.
En el encuentro en su despacho -donde también recibió al gendarme Arsenio Narvay, preso un año y tres meses y luego absuelto por matar a un ladrón mientras estaba de franco-, Bullrich fue elogiosa para con Céspedes, habló de «cumplimiento del deber». «Hagamos la historia contrafáctica», propuso la ministra: «La hubieran condenado por estar a diez metros sin hacer nada».
«En todo momento me sentí amenazada», reconoció Céspedes en el encuentro: «Desde el primer momento les di la voz de alto, se las di siete veces. En ningún momento la acataron. Se dieron a la fuga e incluso me enfrentaron cuando salgo afuera del supermercado y me encuentro con los dos delincuentes. Entendí que mi vida estaba en peligro, no solo la mía sino de quienes estaban afuera, fue a las 10:30 de la mañana en un supermercado donde entra gente constantemente».
El Tribunal Oral N°14 votó en mayoría por la absolución, la jueza Beatriz Bistué de Soler decidió en disidencia ya que consideró que Céspedes debía ser condenada. La agente fue defendida por abogados policiales que ofrecieron una perito psiquiátrica, Céspedes aseguró que la amenazaron de muerte y que los delincuentes hicieron ademanes de disparo. Santos no tenía una pistola encima, pero sí su compañero. Habló también de disparos previos en la escena, algo que fue ratificado por testigos.
Infobae accedió al video de la cámara del supermercado que muestra el hecho: en la filmación se ve cómo Céspedes le dispara con su pistola reglamentaria a Santos mientras intenta abordar su moto y huir. Disparó, según el fiscal Klappenbach, cinco veces: Santos recibió impactos en la zona lumbar y en una mano y murió sobre la calle Ramos Mejía poco después luego de intentar volver a subirse a su moto.
Fuente: Infobae.
