La municipalidad de Rosario realizó controles exhaustivos para hacer cumplir la ordenanza 9375, que estipula que aquellos comercios con acceso desde la calle y utilizan aire acondicionado, deben mantener sus puertas cerradas o la implementar sistemas automáticos que permitan evitar el derroche de energía originada por el uso de los aparatos.
Son 39 los comercios de Rosario fueron apercibidos por el incumpliendo de esta ordenanza, de los más de 250 locales que fueron inspeccionados. De estos corresponden 24 al microcentro, 8 la zona de peatonales y 6 en Barrio Etchesortu.
Los casos fueron derivados al Tribunal de Faltas que decidirá la aplicación de las sanciones que correspondan. La prerrogativa contempla multas, ligadas a los metros cuadrados del local y, en caso de reincidencia, también deja abierta la posibilidad concreta de fijar clausuras de hasta 90 días para los negocios que no cumplen.
La Secretaria de Control y Convivencia municipal, Carolina Labayru, destacó que “en 2018 se detectaron 120 locales que incumplían la norma y en 2019 fueron 68.”
