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martes 23 de abril del 2024

Revelan detalles de la investigación sobre un buque que zarpó de San Lorenzo con 50 kilos de cocaína

La pesquisa inició a partir de la muerte de un buzo.

La Policía de Australia continúa con una profunda investigación sobre un buque que partió hace días del puerto de San Lorenzo en el que se hallaron 50 kilos de cocaína. Le pesquisa se inició a partir de la muerte de un buzo de la embarcación.

Fuentes de la Prefectura Argentina aseguraron a este medio que las fuerzas de seguridad de Australia decomisaron la droga en el Puerto Newcastle de ese país el 9 de mayo.

Según esta información periodística, la investigación se habría iniciado luego del fallecimiento de un buzo con un traje de neoprene con equipo de conducción sofisticado en dicho puerto, que lo vincularía a la aparición de bultos con cocaína.

Sin embargo, el las últimas horas trascendió que través de los sistemas de cooperación internacional e intercambio de información, la Dirección de Inteligencia Criminal de la Prefectura tomó contacto con las autoridades australianas, por lo que esta situación está siendo objeto de investigación por dicho país.

En relación al control de las cargas en nuestro país, se realizaron consultas con las autoridades pertinentes y con la empresa de la Terminal del Puerto de San Lorenzo, responsable de la seguridad de la instalación portuaria y al buque, conforme las normativas nacionales e internacionales vigentes, quienes manifestaron no tener conocimiento de la situación. Además se efectuó también una revisión de imágenes de la operación del buque.

El hallazgo de supuestos bultos con cocaína, no refiere a si la droga se estaba cargando o descargando en el puerto australiano en el buque de nombre B/M «Areti GR» (bandera de Islas Marshall), el que efectivamente operó en el puerto de San Lorenzo entre los días 4 y 5 del mes de abril pasado. Esto no necesariamente indica que pudo haber sido «contaminado» con la droga en nuestro país.

Cabe destacar que todos los buques que navegan en aguas argentinas son controlados en materia de seguridad de la navegación y se les efectúa un seguimiento a través de las estaciones de control de tráfico distribuidas a lo largo del litoral fluvial y marítimo desde que ingresan a aguas de nuestro país y hasta que salen nuevamente de ellas, cuando el barco comienza una travesía en aguas libres, fuera del control de nuestro país, como fue el caso de este buque.

En el caso de la supuesta «contaminación» de este barco en particular, es llamativo porque el método reviste una complejidad y grado de dificultad muy elevado, dado que se trata de colocar droga debajo de la superficie del agua desde el lado de afuera del casco hacia dentro del buque, lo que implica un trabajo difícil, que debería involucrar más de una persona, con mucho profesionalismo y conocimiento de buceo.

Asimismo debe considerarse el conocimiento que debería tenerse sobre las características particulares del buque (distribución de tomas de mar, línea del casco, etc), como así también la utilización de elementos sofisticados y mucho tiempo, para completar la tarea, ya que este tipo de trabajo de buceo, en las aguas de nuestros ríos del litoral, se hacen bajo falta de visibilidad por el color turbio de las aguas, soportando las fuertes corrientes de nuestros ríos y trabajándose «al tacto», lo que impide la precisión necesaria para ubicar el lugar y luego la forma de asegurar la carga dentro de las rejillas (de distinta conformación y seguridades acorde el diseño del buque) y/o hendiduras que posee el buque, por donde ingresa o se expulsa agua con bombas especiales de los sistemas de refrigeración y estabilización del buque, por lo es difícil que la carga clandestina pueda soportar un viaje de 30 días o más, resistiendo estas condiciones y los golpes que el mar da al buque durante la navegación, además de las distintas fuerzas que actúan como corrientes, alturas de ola y diferencias de temperaturas, entre otras.