Gastón Dlugovitzky, el joven que se filmaba corriendo picadas en Rosario y el 6 de marzo del año pasado chocó y mató Fabián Cragnolino en San Martín y Garibaldi, fue condenado este martes a 8 años de prisión. La víctima es hombre de 45 años que circulaba a bordo de una Kangoo por la zona hasta que fue impactado por el vehículo de Dlugovitzky, que conducía a más de 125 kilómetros por hora.
«Estamos acá con la cupé. Como siempre fiel mi cupé, les voy a mostrar de lo que es capaz. Vamos a sacarla a los piques. ¡Uy qué bien que me veo con la cupé! Acá está la ‘cupesita’ Vamos a sacarla a la pista«, decía Dlugovitzky, de 21 años, en un video que filmó con una mano sosteniendo al celular y otra al volante, a bordo de un automóvil conduciendo a gran velocidad.
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Las imágenes se habían viralizado en las redes sociales. El hecho había ocurrido tres meses antes del siniestro vial que provocaría la muerte de Cragnolino, un padre de tres hijos que trabajaba como supervisor de los caminos de recolección de residuos y que fue tesorero de la comuna de Ibarlucea.
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El caso conmocionó a Rosario e incluso llegó a medios internacionales como Daily Mail de Inglaterra, el segundo periódico más leído de Reino Unido.
Un año y siete meses después, Dlugovitzky fue condenado. Así lo determinó el Tribunal Pluripersonal compuesto por los jueces de Primera Instancia Isabel Mas Varela, Mariano Aliau y Rodolfo Zvala que dictó prisión por 8 años para el joven de 21 años, que también recibió inhabilitación especial para conducir por los próximos 10 años por el delito de Homicidio Simple por dolo eventual en calidad de autor.
La fiscal de la Unidad de Homicidios Culposos, Valeria Piazza Iglesias, manifestó tras el juicio «estar muy conforme con el fallo». «No se trató de un mero accidente de tránsito, fue un siniestro vial. Por pericias quedó acreditado que conducía a más de 125 kilómetros por hora en una zona urbana. Fue un día de semana, ese día Rosario Central jugaba por Copa Libertadores y avenida San Martín estaba poblada de gente», explicó.
«Dlugovitzky venía repitiendo este tipo de conductas desde hace mucho tiempo. Lo acreditamos no solo por un video que viralizó que ocurrió en 2018, sino por una serie de audios hacía alardes de la velocidad que conducía y manifestaba que conducía a 200 kilómetros por hora sin frenar en ninguna esquina», concluyó.
